miércoles, 15 de abril de 2009

Nicanor, Nicanor Parra.


Personalmente Nicanor Parra me provoca esas cosas distintas que se sienten al leer algo, cualquier cosa, y que centran la atención fuertemente en este "antipoeta" (evidentemente que no se trata solo de un poema). Es como quizás cuando escuchamos alguna buena canción, nos interesa y conocemos el disco completo del artista, la discografía, etc. Está claro que esto toma tintes distintos, pues, se trata de Poesía.

Para contextualizar un poco, pues, no es el ánimo construír una biografía, nace en 1914 (en septienbre cumple los 95), en el seno de una familia de artistas (cosa clara). Sin embargo fue el único con la oportunidad y el hambre de educarse más allá de la primaria. Estudia Matemática y Física en la U de Chile (incluso se matricula para estudiar al mismo tiempo Ingeniería, Leyes e Ingles, aunque poco duró en ese intenso trote), Mecánica avanzada en EE.UU y Cosmología en Gran Bretaña. Cosa que resulta llamativo, por lo menos es difícil encontrar a alguien en alguna Facultad de Ingeniería o Ciencias Físicas y que además tenga la suficiente sensibilidad para hacer poesía (que me parta un rayo ahora mismo si hay alguno en el 2009) y sobre todo a ese nivel.

Recuerdo cuando me interesó Parra, en uno de los programas de Una Belleza Nueva en donde un cura (que no recuerdo su nombre) era seguidor y "traductor" de su poesía. Colocaron en audio la declamación hecha por él mismo (Nicanor Parra) de su poema "El Hombre Imaginario", y me pareció espectacular. (he buscado mucho ese audio original y no le he encontrado, si alguien lo tiene sería de agradable que lo compartiera).

Ha sido portulado para el Premio Nobel en más de un par de oportunidades.

Les dejó con El Hombre Imaginario, por su puesto, si quiere agregar algo o comentar lo pueden hacer con absoluta libertad, esa es la finalidad de esta publicación, además de la intención medio alocada de mis dedos después de un día de mucha Teoría de Sistemas, que me dejó ganso.

PD: Aún no me cae ningún rayo.



El hombre imaginario
vive en una mansión imaginaria
rodeada de árboles imaginarios
a la orilla de un río imaginario

De los muros que son imaginarios
penden antiguos cuadros imaginarios
irreparables grietas imaginarias
que representan hechos imaginarios
ocurridos en mundos imaginarios
en lugares y tiempos imaginarios

Todas las tardes tardes imaginarias
sube las escaleras imaginarias
y se asoma al balcón imaginario
a mirar el paisaje imaginario
que consiste en un valle imaginario
circundado de cerros imaginarios

Sombras imaginarias
vienen por el camino imaginario
entonando canciones imaginarias
a la muerte del sol imaginario
Y en las noches de luna imaginaria
sueña con la mujer imaginaria
que le brindó su amor imaginario
vuelve a sentir ese mismo dolor
ese mismo placer imaginario
y vuelve a palpitar
el corazón del hombre imaginario

2 comentarios:

katherine dijo...

Recuerdo muy bien ese poema!

cuidate no más! y... fin...

En paz y sin rencOr!.

Conociendo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.